Salió el tan esperado primer disco de Shit happens, proyecto autogestionado y llevado a pulmón por sus músicos. Lo presentarán el seis de septiembre en Salón Pueyrredón.
Por Guerchu
@lguerchu
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Shit happens, o como dice Dash Mortem, “La mierda pasa, loco”. Es azar. Cualquier mañana, tropezarse en la 9 de julio, cortarse la cara, perder el empleo, ser víctima de un robo, recibir la factura del ABL, viajar al centro en paro de subtes. ¿Qué sería de la vida sin la desgracia cotidiana de la ciudad, sin las bocinas ni las puteadas entre colectivos, taxis y motos? Seguramente un lugar aburrido, un mundo con pleno sentido y alienación no muy distinto del actual. Elogiar la desgracia es la solución: gritar contra el mundo aburguesado de la oficina, patear las paredes, enfrentar el poder.
Para todo esto llegó el album de Shit Happens (“Los Mierda” en rioplatense), un grupo urbano de muchachos que tocan “para despertarte y empujarte fuera de ese agujero negro” como gritan en La voz de tu conciencia.
Homónimo al nombre de la banda, el disco que sacaron es un proyecto autogestionado que pasó por varias etapas. “Producido y editado en su totalidad por Los mierda”, fue grabado “entre julio y diciembre de 2009”, pero quedó inédito casi tres años por “acotado presupuesto”, como aseguran, la falta de recursos que siempre cuesta conseguir para hacer arte. El reciente abril de 2012 finalizaron el proyecto con el gesto de editar e imprimir una tirada de 300 copias, con un diseño y estilo duro de graffiti, una fotografía de tapa a lo Beggars Banquet y un arte interior duro e insurgente donde un policía con cara de cerdo te mira a los ojos. Todo con el plus de incluir un video clip interactivo, producido por Cutre films, donde se los ve caminar los suburbios, caerse del skate y tocar entre escombros. Un disco creado para destruir.
“Claro que lo dejamos en la red para que pueda bajarlo quien quiera en forma gratuita ya que lo que más nos interesa es que nuestros temas se escuchen, se pasen entre amigos/as”, escribe Dash a modo de mensaje en esta obra maestra. “Saber quién grabó a la banda o quién sacó la foto de la portada, Fa! Eso te quisimos brindar en este disco”, que se puede conseguir en el local Kalaka de la feria Bond Street, pedir por mail o Facebook.
Los mierda mezclan “punk con hard-core, hard rock, old school, rock & roll y speed-rock”. Habitué de antros como Speed King, se presentan el próximo seis de septiembre en Salón Pueyrredón. “Thrash-Rock es lo suyo”, Shit Happens es una banda que pide pogo, que propone pervertir y revolear muñecos industriales, que descarga la tensión y la ira urbana moderna con golpes densos, violentos y urgentes.
Sus letras, plenamente contaminadas, recuerdan a Boom boom kid. Su filosofía es callejera, sus líricas realistas hablan de la mierda del sistema, de la injusticia y la represión como en Las calles: “y ahora kedan flias. vacías, sin justicia, ni un consuelo, por ke nadie hace nada por esto, y vuelve a suceder… entonces shit happens”; exaltan la alegría y el estímulo, como en I’m happy: “the drugs is stimulating my brain, the music is stimulating my spirit, your sex is stimulating my sex” o niegan la culpa legal que impone el estado represivo: “sometidos al maltrato y la humillación, vos me tratás como un delincuente, pero yo no lo soy”. Sus letras tienen preguntas de hartazgo sin respuesta, todo surge de la contemplación del propio espíritu como en Introspección: “Contemplar, eso hace bien, no es como estar perdido en el tiempo, disfrutar mas no sufrir, ese encuentro con uno mismo ke no es más ke introspección”. Su música da respuesta a las preguntas con una energía destructora, ideal para el accidente del skate, en la pista del Parque Centenario, al hacer un 180 ollie. Ideal para soportar y festejar la mierda.
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