Hay un pueblo originario cansado, resignado, agotado, durmiéndose en medio del abandono de una sociedad que los desconoce a ellos, los Mbyas Guaraní de San Ignacio, Misiones. Por Romina Bianchi Allí, a unos tres kilómetros de donde vivió Horario Quiroga, la vida se vuelve prehistórica. Las huellas del camino suelen perderse, el reloj no goza...