En tiempos de internet, se afianza una nueva tendencia: ir a comer a la casa de un extraño y degustar su especialidad gastronómica casera. Un encuentro íntimo e inédito
Por Ma. Soledad Goyanes
@MSolGoyanes

La luz tenue, la música suave, y la capacidad para un número reducido de comensales habilitan un clima íntimo donde es posible charlar de forma amena y hacer nuevos amigos a partir de las mesas compartidas. La clave es sentirse en el living de casa. De eso se trata Cookapp.
La experiencia recrea la comodidad de una reunión de amigos y la calidez de la comida casera, pero fuera de casa. Y va por más: permite conocer gente nueva. Es ahí donde la cosa se pone interesante. Se generan miles de expectativas, ansiedad, nervios sobre con quién se compartirá la velada. Entra así también en juego el misterio.
El lugar elegido para esta ocasión es Gungur, donde cocina Rabí. La cena es servida en un centro cultural donde durante el día se practica la literatura y la danza como ofrenda. Una vez allí, las sensaciones se complementan e intensifican con un sinfín de aromas del mundo, sutileza de las especias. El diálogo que no cesa ni por un segundo; todo es novedoso y desconocido para esa persona que nos ve por primera vez.

Para quienes se aventuren a descubrir nuevos sabores, la comida india resulta tentadora. Los platos condimentados con especias picantes son realizados por el chef nativo, quien durante la velada se acerca a las mesas para comentar de qué trata cada degustación. Es interesante que quienes ofician de mozos se encuentran vestidos de modo informal, que nos hace sentir aún más en casa.
Al mismo tiempo, un gran número de atractivos culturales cautiva nuestros sentidos. Los elefantes, la indumentaria que utilizan durante la danza, una música instrumental agradable y los mudras en tanto gestos sagrados representan significaciones de gran valor para el hinduismo y despiertan nuestra curiosidad.

Cookapp se presenta de este modo como una alternativa diferente y divertida. Por un lado, el menú se vuelve altamente inclusivo al contar con platos para celíacos, veganos y vegetarianos. Por el otro, algunas propuestas combinan la comida casera con shows en vivo o por ejemplo, la lectura de runas. Un dato novedoso: algunos chefs hacen de su casa un lugar “pet friendly”. E inclusive nos sorprende al encontrar clases de cocina: por qué no convertirse en un chef que abre las puertas de su casa y agasajar comensales.

